domingo, 23 de noviembre de 2008

Jóvenes y memoria: recordar y participar

Acompañé a dos grupos de alumnos del nivel Polimodal del ex Colegio Nacional y de la Escuela Normal Superior de Bragado que pasaron tres días en el Complejo Turístico de Chapadmalal para dar cierre al programa Jóvenes y Memoria, recordamos para el futuro, impulsado por la Comisión Provincial por la Memoria.
Fue sin duda, una experiencia muy intensa puesto que el programa les propone a los estudiantes secundarios de todas las escuelas de la provincia trabajar sobre el eje “autoritarismo y democracia” y promover la reflexión sobre nuestro pasado reciente, sus consecuencias y sus vinculaciones con el presente.
Los ochocientos jóvenes que se encontraron en el Complejo asistieron a la exhibición de sus producciones realizadas durante todo el año asistidos por la Comisión en el cine del Hotel 8 y, además, participaron en talleres de radio, video, stencil, escritura y foros de discusión en los que se debatieron, entre otros temas, la baja de la edad de imputabilidad a menores.
Junto al mar, los alumnos se contaron experiencias, conocieron otras realidades, vislumbraron otros mundos y otras problemáticas.
Los videos que presentaron los chicos de Bragado fueron el resultado de un largo trabajo y ambos, de manera distinta, plantearon la cuestión de qué pasa con la memoria sobre la dictadura en nuestra comunidad.
“Un paradójico lugar”, realizado por los chicos de la Escuela Normal Superior reflexiona acerca del significado del Parque de la Memoria para los bragadenses. Para ello hicieron encuestas a los vecinos y a familiares de víctimas de la represión.
Los chicos del Colegio Nacional en “Pintadas”, decidieron investigar la estrecha vinculación entre iglesia y dictadura a partir de la experiencia que tuvo Bragado de albergar durante ocho años al cura genocida Christian Von Wernich. El video indaga puntualmente cómo fueron aquellos días en que el cura llegó a la ciudad, y cómo se organizó la Marcha del Silencio en 1988 para repudiarlo a partir de las marcas que quedaron en las paredes y que siguieron hablando a pesar del silencio.
A través de este trabajo, los jóvenes nos dieron a los adultos una lección de compromiso. Imágenes que cuentan una historia que todavía en Bragado nadie se ha abocado a dejar registrada para el futuro y que ahora queda documentada.
Si en otros tiempos nos resultaba difícil abordar estos temas en la escuela por indiferencia y falta de compromiso de muchos docentes, en esta oportunidad el apoyo oficial fue total desde la escuela, la Jefatura de Inspección y la Municipalidad de Bragado, instituciones que han valorando el trabajo.
Los docentes que sufrimos la dictadura sentimos la obligación y el deber de revisar con nuestros alumnos ese pasado para seguir construyendo la democracia. Y también es la obligación de las nuevas generaciones de docentes capacitarse para activar el proceso de construcción y transmisión de la memoria colectiva como forma de afianzar los valores en derechos humanos, las prácticas democráticas y el compromiso cívico crítico de sus alumnos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Fue una experiencia inolvidable, gracias por tu ayuda, y por haber hecho posible nuestra participacion.

EEM Nº4

Anónimo dijo...

Muchas gracias por publicar este material. para mi el caso de Cecilia era casi un mito, del que se hablaba con muy poca información disponible.
Saludos, Cecilia